Uno a uno los fui contando...en total resulta que fueron once...unos más pequeños que otros pero once...bien ubicados...esparcidos en tu rostro...once...y me contaste un secreto...me dijiste la ubicación de otro más...pero...no recuerdo bien el lugar...estaba del lado derecho o izquierdo?...por la risa nerviosa no alcance a escuchar, y que pena preguntarlo otra vez...y nos despedimos como siempre...con un abrazo que pareció eterno...sonreiste para mi, mientras desoncertado me preguntabas que había pasado conmigo el domingo anterior...es que sabes que no estaba bien...que fue diferente a lo que estas acostumbrado ver en mi...y no supe que decirte...y son once los que conté con mi mano...mientras no dejabas de jugar con los pliegues de mi pantalón...sí tengo buenos reflejos...no hace falta que des golpecitos a mi rodilla...que ternura verte recostado ahí...parecías aferrado a algo...todavía no se a qué?...y fueron once entonces...once...once tus lunares....y once los minutos que vas tarde a tu examen...todo por estar aquí...
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